domingo, 30 de septiembre de 2012

C. E. I. U. (Tú lo sabes)


Ahora que sé que fuiste tú estoy muy tranquilo. Hay códigos que no se deben jamás romper, hay lealtades que no pueden ser trastocadas. Este tipo de actos resulta siempre injustificable, pero por sobre todo te denigran totalmente como persona. Cuanta energía invertida para lograr vislumbrar el autor y tanto mal rato, discusiones acaloradas donde hice y me hicieron mucho daño. Cuanto tiempo también invertiste tú en algo que bajo ninguna perspectiva te habría dado frutos, quisiste hacer el mal y definitivamente lo lograste. Intencionadamente has buscado el odio y el malestar de mucha gente, no tienes la más mínima idea de todo el mal que haz hecho. Conny, lo que has hecho es patético al igual que tú.
¿Cambió algo a tu favor? No, no obtuviste que te quisiera como pretendías, no obtuviste nunca un “te amo”, y si las personas son lo suficientemente cautas para ver dentro de ti nadie te dirá algo así.
Me hiciste ver y sentir como si estuviera loco, cumpliste tu palabra de que me iba a arrepentir de que dejásemos de estar juntos de una forma rastrera y estúpida. Al menos, por perseverancia no te quedas, pero habría sido mucho mejor para tí que esa cualidad la hubieses practicado en algo que fuera de utilidad.
No me despiertas sentimiento alguno de empatía o de pena, por el contrario, lo que tú has hecho es horrible y no dudes en que en cuanto pises piso cercano me voy a enterar de uno u otro modo y haré que le pagues a la ley lo que te mereces. Creí en ti, confíe en tí y no has buscado hacer más que daño, y ni siquiera sólo a mí, sino que a personas que para mí tienen un significado especial. Eres despreciable y te prometo, no te perdonaré mientras esté vivo. No escribo esto ni para que te sientas superior ni para que tu ego aumente, tengo la esperanza de que quizá no vuelvas a hacer este tipo de imbecilidades, quiero albergar en mí la idea de que tendrás la fuerza de voluntad de rectificar tus obras. No seré yo el que no podrá ver a su familia en quien sabe cuanto tiempo por andar haciendo “bromas pesadas” a los demás, no seré yo quien tenga la conciencia sucia durante toda su vida.
Has herido, has matado, has contaminado todo lo que se ha puesto en tu camino por un ego mal llevado, por no entender en que consiste el aprecio y el cariño de los demás. No has respetado en lo más mínimo el sentir de tu prójimo, me da una sensación extraña el pensar que ni siquiera sé si denominarte o no ser humano. 
Ni me voy a tomar el tiempo en releer esto, no vale la pena. Tan sólo te estoy avisando que la certeza es de un 101%, de que fuiste tú. No eres tan inteligente, ni tan genial como creíste ser y más allá de ello eres un ente horripilante sin contenido interno, totalmente vacía y odiosa, una psicópata total.
¿Te faltó algo?, ¿Cuál es tu impedimento?, ¿Cuál es tu excusa?, ¿Hay algún atenuante? De chica fuiste a uno de los mejores colegios del país, invirtieron todo recurso posible en tu educación, tienes talento como arquitecto y eres una excelente fotógrafa. Buena presencia, buena dicción, simpática, quizá hasta encantadora a ratos para quienes no te conocen. Dos padres que te adoran y que han hecho todo por ti, jamás te han privado de nada. Tú hermano te extrañará, te va a necesitar mucho, pero claro, eso no te importa ¿Qué justifica tus actos? Nada, nada jamás.
Hice todo lo que pude, ayudé en todo cuanto me fue posible, pero lo tuyo amerita apoyo psicológico drástico. Ni siquiera te pongas frente a mi vista, de ahora en delante no me hago responsable de lo que pueda decir o hacer.
Ya tendrás tiempo de pedir disculpas a todos lo que les hiciste pasar uno o varios malos ratos, todo tiene costos y estos karmas los pagarás algún día, si es que no estás amortizando cuotas desde ya. No te preocupes por mí, no me pidas perdón por que para tí no tengo. Estoy enojado, estoy dolido, conmigo mismo por haber sido tan ingenuo y dejado que entraras en mi vida. Pero no importa tanto, saliste por tu cuenta y en la peor de las formas. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario