lunes, 30 de junio de 2014

Dijo, luego murió

Ser o no ser,
Dijo Shakespeare,
Y murió.
Para grandes cosas se requiere tiempo,
Dijo Séneca,
Y murió.
Me gusta cuando callas por que estás como ausente,
Dijo Neruda,
Y murió.
Pienso luego existo,
Dijo Descartes,
Y murió.
Ambición y amor son alas de las grandes acciones,
Dijo Goethe,
Y murió.
Los grandes conocimientos engendran las grandes dudas,
Dijo Aristóteles,
Y murió.
Cuando somos grandes en humildad nos acercamos a lo grande,
Dijo Tagore,
Y murió.
La vida sin música sería un error,
Dijo Nietzsche,
Y murió.

Quizá moriré, algún día.


viernes, 27 de junio de 2014

Lady Jane


Rafael no sabía donde estaba. Según su reloj había recorrido una media hora, seguramente en dirección hacia la costa. La sensación dentro del auto, a pesar de estar vendado, fue de que iban en subida constante. El sonido del motor del auto así también se lo sugería, nunca pasaron de segunda.
No había sido propiamente un rapto, de hecho tenía claro que pasaría en algún momento. Misteriosas camionetas negras en cercanías de su casa. Llamados curiosos a altas horas de la noche. Cartas sin destinatario en su puerta que detallaban con todo tipo de pormenor los libros que estaba leyendo.
Alguno de sus maestros le advirtió de que estaba pisando un terreno escabroso, de empinados senderos. Mas no hizo caso, le gustaba el riesgo.
Por lo que leyó en el papel, en un vistazo fugaz, le querían hacer parte de ese grupo de trabajo y estudio del que tanto había leído; pero en definitiva no podía comprobar nada.
La emoción que le llenaba el pecho no era clara. Rafael estaba con el ego henchido, por fin alguien dio importancia a sus talentos y a las horas invertidas en pulir sus conocimientos. No obstante, no quería jugar a hacerse el valiente. Algo de angustia sentía en la profundidad de su ser. Quizá alguien le lavara el cerebro y lo pusiera a trabajar de esclavo en una mina de carbón en el continente negro. O peor, estaba en una condición de vulnerabilidad absoluta, sin medio de comunicación alguno y nadie le extrañaría antes del Lunes, que era cuando se suponía volvería a casa; en casi una semana más.
El cuartucho tenía un aroma a humedad y parecía no ser usado con frecuencia. No había ventanas, el equipamiento solo consistía en un silla de mimbre antiquísima y una “mesa”; en realidad una cubierta de masisa con parte del enchape original superpuesta en unas patas de fierro.
Puso una oreja en la pared y tuvo la certeza de que en algún sitio de la casona alguien escuchaba Lady Jane. Se quedó escuchando por un buen rato, total de todos modos le gustaban The Rolling Stones.

miércoles, 25 de junio de 2014

Todos tenemos algo pajarístico

Repita una palabra tantas veces como sea necesario para volatilizarla. Analice el residuo.

Juan Luis Martínez.

Respuesta al Pajarístico Juan Luis.

La única palabra que repetiria una y otra vez, con gran gusto, es vida.
Repetirla de principio a fin,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
Para volver al principio y disfrutarla,
*















* NOTA: El número de repeticiones queda a completo criterio del lector.

jueves, 19 de junio de 2014

Húmedo Réquiem

Mientras sigue corriendo el agua,
desbordando la vasija;
me transformo en humano cántaro
 y corre por mis mejillas, salobre,
el agua más del sabor más triste,
lúgubre y agrio.
En el agua yaces,
Que se mezcla con tu sangre
Cubre tus párpados y pinta,
Con pequeñas olas,
Tu mortecino y blancuzco rostro
Que no tuvo tiempo de despedirse.
Desnuda, inerte, serena;
Por fin,
Sin preocupación por el ayer
Ni el mañana.
Si lo hubiera sabido,
Camila,
Si lo hubiera sabido.
La bañera rebasa,
No despiertas,
No está tu alegre risa
No está tu mirar cálido
(Que no volveré a sentir).
Pronto tu voz rehuirá de mi memoria,
Luego se irán tus frases,
Tus gestos.
Tal vez me quede con el aroma
De tu pelo, de tu piel,
El sabor de tu boca y tus besos.
Quizá, solo quede el sabor de
Esta espesa gota que recorre
Mi rostro y recae en los labios
Que algún día, te besaron.
Si lo hubiera sabido,
Camila,
Si lo hubiera sabido.






Para Camila, a dos años de su triste, lamentable y penoso fallecimiento por elección...

lunes, 16 de junio de 2014

Brindis por los choferes

Brindaré por el chofer
El taxista, el conductor
Que me lleva a la labor
Con un ágil proceder.
Ser veloz es menester,
De manos firmes y expertas.
Su rapidez desconcierta.
Me tiene, incluso mareado;
Me debiera haber bajado
Hace como cinco vueltas.

viernes, 13 de junio de 2014

Estadísticas interesantes

En la previa del partido Chile-Australia podemos señalar varios datos interesantes: en cuatro partidos en que ambas selecciones se han enfrentado Chile a anotado seis goles, Australia solo uno.
Todos los partidos han empezado con el marcador 0-0, pero no siempre terminan de esa forma.
De los nominados de nuestra selección 12 han sufrido pediculosis, de los rivales uno fue mordido por un koala y dos resultaron atacados por cocodrilos veganos a lo largo de su vida.
Se ha jugado siempre en canchas con dos arcos.
Nuestra selección, en promedio, calza 41. La australiana 43.
Los componentes de nuestro combinado se demoran aproximadamente 7:23 minutos en lavarse los dientes, los oriundos del sexto país más grande del mundo en superficie se toman 6:57 minutos.
Jamás se ha suspendido un partido por la intromisión de un huemul o kanguro. Cocodrilo Dundee no ha anotado por su selección, ni el Chuña lo ha hecho por la nuestra.
Australia es prácticamente una isla y Chile prácticamente también.

jueves, 12 de junio de 2014

Heteronimos


Cuando llegué al estudio me quedé con la impresión de que ambos llevaban conversando mucho tiempo. Un grado de concentración máxima, casi como un trance los envolvía, debí conformarme con leves movimientos de sus cuerpos como saludo. Casi, fui imperceptible para ellos.
- No estoy de acuerdo, no pueden haber límites para lo que se quiere escribir. Eres demasiado conservador. Aquiles, tienes que lanzarte sin miramientos.
- Es que esos temas van fuera de mi línea, me da un poco de pudor hacer literatura erótica.
- ¿Y qué? – Juan era indiferente a todo lo que ocurría a su alrededor casi todo el tiempo, salvo que le sirviera de fuente de inspiración. No era posible hablar de subjetividades con él, todo en su mente era trabajo y producir, producir, producir. Jeria, el Aquiles para sus amigos, era muy distinto. Siempre comparándose con sus pares y cayendo a menudo en inanes pugilatos y debates con sus contemporáneos. Se limitaba mucho en las materias de su escritura y en los formatos a emplear.
- ¿Cómo qué?, ¿Te parecería poco que me dejaran fuera de las revistas?, ¿Fuera de la editorial por inmoral?
- Me decepciona que no lo hayas pensado.
- ¿Pensado en qué?
- Pessoa, Pessoa hombre. Nunca escribió para nadie, alguien encontró por ahí algunos papeles en su escritorio y finalmente tenemos al mejor escritor de Portugal. Para no limitarse usaba heterónimos.
- ¿Hetero qué?
- Heterónimos.
- No sé que es eso…Di Sarrey siempre con sus conceptos estrambóticos.
- Son otras personalidades, otros nombres para permitir que fluyan desde dentro tuyo miles de ideas frescas. Cámbiate el nombre y escribe fogosamente.
- ¿Tú los usas?
- Siempre, de hecho es difícil distanciar a uno del otro y saber que tema escribiría uno y que tema aquél. A veces se me mezclan. Tengo cuatro, según recuerdo. Ahora que lo mencionas perdí una carpeta completa de poemas…Con uno de mis heterónimos, si la ves me la traes, por favor. Es verde.
- Volvamos a tema, ¿Fernando Pessoa?
- Exacto.
- No he tenido el placer de leerlo. –Aquiles, siempre estaba aprendiendo de los demás. No era un explorador, era en realidad un oportunista al acecho.
- Toma, léelo. Es genial. Invéntate un buen nombre, por favor. El tuyo es como de otra época: Aquiles Jeria. Ya, vuelvo al trabajo. Hay mucho por escribir.
Finalmente se despidieron, pero yo seguí siendo invisible para ambos.

lunes, 9 de junio de 2014

Es el diario desafío


Para el arte de rimar
Hay formato establecido
Sirve para no fallar,
Para a todo verso dar
Un objetivo y sentido.
Los que estén al alcance,
Usárelos con frecuencia;
Creciendo con gran avance
Para hacerlo sin percance,
Y con la más plena ciencia.