jueves, 28 de noviembre de 2013

lunes, 25 de noviembre de 2013

Oda a una francesa

Mito erótico,
Musa inspiradora por antonomasia
Dotada de gráciles movimientos
Vas envuelta por cuarenta y ocho cintas
Que adornan tu protagónica belleza,
Voluptuoso monumento
De colosales proporciones
Dios te creó, mujer,
Como un acto de amor .
Hordas te persiguen,
Muñeca preciosa
A la que un bruto, como yo, sigue.
Símbolo sexual de ayer y también de hoy,
Dotado de curvas dadivosas
Y una carne solidaria con el desamparado.
Sobretodo si es cuadrúpedo,
Por que los hombres somos bestias
Y aún así ellas se comportan mejor que nosotros.
Pero solo tengo dos pies sobre la tierra,
Que se mueven al mirar tu baile,
Baile descalzo sobre una mesa,
¿Quieres tú bailar conmigo?
Baila a rienda suelta
Ilumina al sol,
Que se opaca ante tí.
Eres el sol de mi vida,
Espero no me rechaces
Como rechazaste a la legión de honor.
Pícara francesa,
Pícara colegiala.parado

Inspiración del mundo.

martes, 19 de noviembre de 2013

Por travesura

Brindó la mujer dichosa
en su medio de transporte,
cuanta elegancia, ¡Qué porte!,
en bicicleta pomposa.
Tan cromada y tan brillosa,
miles de rayos le cuento,
corre más rauda que el viento;
tan sólo falta un detalle:
pa' que la bici no falle
hay que ponerle el asiento.

domingo, 17 de noviembre de 2013

La pescá...


- Casera, casera. Rica la albacora le tengo. Elegida y pesada.
- Reineta le tengo, fresquita y la más linda. Hasta con receta se la doy, casera, caserita.
- El jurel, jurelito, del puerto a la mesa. Garantizado.
- Míreme el pejerrey, casera, rico el pejerrey sanito, bonito. A dos luquitas el kilo casera, dos luquitas.
- El congrio, el multicolor. Dorado le tengo, colorado y negro, a elegir a elegir que se me acaba. A cuatro piticlines, elija casera. Si no le gusta le cambiamos el color, cuatro piticlines.
- La merluza baratita, la merluza baratita. A dos pesos el kilo, a dos pesos y con yapa.
- Vote por mí, soy un candidato honrado. Cambiaré la Constitución y le daré educación gratis al país.

viernes, 15 de noviembre de 2013

Poesía

Solo di, ¿Qué es poesía?
Ni la vida ni la muerte,
Ni fatalidad ni suerte,
No es ni pena ni alegría.
¿Por saberlo que darías
Si se pudiera explicar?
Eso que te hace soñar,
Esa magia inexorable,
Perfección inexplicable;
Lo que te hace respirar.

martes, 12 de noviembre de 2013

Dedicado a las viejas hipocondríacas que abundan en nuestra faja de tierra.


Una vieja hipocondríaca,
Por que siempre enferma está,
Armando gran alharaca
Conocí días atrás.

Cuando me la presentaron
No me lo podía creer
¿Que este tan extraño ser
No ha de cerrar nunca el tarro?
Que llevaba días en paro,
¿Pega? Eso ni por si aca;
Si la enfermedad ataca
Un poco más día a día,
Con fuerte tos lo decía
Una vieja hiponcondríaca.

Un gran dolor de cabeza,
Un crónico reumatismo
La tienen en el abismo,
Según a contar empieza.
Levantarse, gran proeza,
Duele arriba, duele atrás
Que no sabe que hacer ya,
Con todos los malestares;
Y tiene tantos pesares
Por que siempre enferma está

El doctor le ha comentado,
Con tristeza y con mesura 
Que para su mal no hay cura,
Según lo que ha investigado.
Yo como poco enterado
Oigo para no ser vaca.
Sus cosas casi ya empaca
Para ir rumbo al Hospital,
Dice que todo está mal
Armando gran alharaca.

Y comienza y me enumera:
- La Próstata ya me falla,
Mi testículo no acalla;
Que me duela, me supera.
(Que vieja más cahuinera,
pienso yo por lo demás).
También padece, capaz,
Eyaculación precoz;
A esta vieja tan atroz
Conocí días atrás.

Y varicocele tengo
- Comentaba la Señora,-
Y ya no me quedan horas
Para morirme, prevengo.
Mi tranquilidad mantengo,
Poniéndole mi atención.
Pienso luego en su aflicción,
Y como soy hombre zafio
Imagino su epitafio:
“¿Ven que tenía razón?”

sábado, 9 de noviembre de 2013

Caminata infinita


En condiciones normales se encontraría plácidamente jugando Go en vez de en un lugar perdido de la ciudad, al que hasta los buses de locomoción colectiva deben llegar con gran esfuerzo, casi renqueando.
El tiempo corre, y ya estaban atrasados.
Ella rara vez llega a la hora acordada a una cita, cosa que a él usualmente le da lo mismo. Pero el día de hoy es distinto, hace unos días y tras un estallido de furia inexplicable de parte de la chica de sus sueños, ya no la puede mirar con los mismos ojos. Está saboteando la relación a sabiendas y hoy, nuevamente cae en dicha práctica.
Llegó tarde – Pase. Está enojada – Pase. Comienza a gritar – Mmmmmmm. Llora por dinero perdido – Esto no es normal, Dios me libre.
Desde el faldeo del cerro, donde lo mandaron literalmente a la punta del cerro, la Avda. se ve muy larga,  y cuesta arriba. Aunque en realidad el camino va derecho y en bajada, no es el esfuerzo físico el que le preocupa, es el esfuerzo mental de tener que soportar esos berrinches desproporcionados, esa ira ante su persona, ese fuego aliado. Él, que ha sido el único que ha confiado plenamente en ella, que le buscó un trabajo, que trata de entenderla, de quererla y de amarla. Único exponente en el mundo que la respeta, a pesar de su carácter inmanejable y odioso. Hoy le están dando de palos y la calle se angosta y alarga ante sus ojos, la solera se humedece antes su pies por el llanto rabioso que ella vierte.
El vestido floreado precioso que lleva, ese cabello sedoso y brillante, ni esos ojos de múltiples colores hoy se ven bellos. Van tres días en fila en que no ha disfrutado nada de ella, ni un beso, ni una palabra, ni caricias. 
Si está aburrida, ¿Por qué no lo dice? Si quiere marcharse y dejarlo solo, ¿Por qué no lo hace? No, ella prefiere causar todo el daño posible antes de tomar una decisión.
Terrible, y lo más triste es que él no se da cuenta. Ha entregado mucho y recibido poco, y haga lo que haga siempre será culpable, estará equivocado y será un desgraciado infeliz (eso le dice constantemente ella).
Y la calle no acaba, y la calle es infinita. Y no hay palabra que valga, solo el llanto llena sus oídos. Solo el odio le rodea…
Tal vez algún día, la calle se acorte en compañía de otra mujer.