martes, 18 de diciembre de 2012

Enfermedad progresiva


No recuerdo que fue primero, si la enfermedad de Dummy o la irresponsabilidad de Bobo. Creo que lo de Dummy fue algo que vimos venir de antes, pero aún así no supimos hacerle frente. Era un muchacho encantador, completísimo en todo ámbito. Buen deportista, buen actor y comediante y además, un galán.
Si tuviera que mencionar algo en su contra, ya tratando de rebuscar algún argumento, lo único que le perjudicaba era su memoria a la hora de aprenderse los guiones. Pero con su ingenio y espontaneidad siempre supo salir del paso siempre.
A veces era insostenible seguir grabando.
Los cámaras comentaban entre ellos lo que sabían de oídas sobre las tramas, anticipaban alguno de los chistes o de las situaciones de los cortos. Unas veces los ayudaban los disfraces, otras con los objetos de tramoya. La cosa es que casi siempre obtenían alguna exclusiva, y el efecto de la risa no los inundaba tanto. Pero cuando Dummy olvidaba algo era imposible no reir, empezaba a improvisar y hacer payasadas con lo que tuviera al alcance. Dejábamos rodar el rollo y a veces podía sostener el sólo una escena por cinco minutos incluso, era sorprendente.
Muchas tomas se estropearon por que los cámaras se olvidaban de su cometido por estar agarrándose la barriga para aguantar la risa; recuerdo a uno de nombre Humberto que se desmayó por un alza de presión.
Era un talento total, una sensación.
Un ser humano impecable, lamento que su suerte con las mujeres no haya sido de las mejores en lo que a matrimonios respecta. Imagínate, falleció habiendo cumplido apenas cuarenta y ocho…cuarenta y ocho y con cuatro matrimonios a su haber… y en esos tiempos. Figúrate tú que uno no duró más de tres meses, nadie en el estudio se lo explicaba, se veían tan enamorados…
Dummy podría haber conseguido la mujer que quisiera, pero era tan obstinado que no escuchaba consejos. Tenía un patrón extraño, en cuanto una mujer le provocaba inseguridad; trataba a toda costa de enamorarla.
Tomando en cuenta que cuando lo contrataron le exigieron cortarse el bigote y sus rizos, dejándolo en evidente calvicie, el pensaba que su atractivo hacia las féminas había desaparecido. Se dedicaba a gastar el dinero en cuanto le interesaba alguna. Casas, autos, vestidos, joyas. Nada era suficiente, por el contrario, cada vez invertía más.
Para que decir después del capítulo aquél en que Chimp perdió un diente y Dummy recibió un balazo. Su cojera era difícil de ocultar en planos abiertos, desde ese día su enfermedad avanzó a pasos agigantados, engordó y ya no era capaz de mantener la exigencia del día a día en el estudio. Por contrato debían cumplir con ocho capítulos al mes, lo que era demasiado. Chimp, siendo tan ordenado y disciplinado casi no lo soportó. El ataque de Dummy en plena grabación fue una alerta, pero demasiado tardía. Le detectaron un cáncer cervical que poco a poco lo fue apagando, aún cuando mantuvo el humor hasta sus últimos días. Eso gracias a Estela, sin ella quien sabe que habría sido de él.
Había que ayudarle a vestirse, a comer, darle sus medicinas a todas las horas del día y evitar que durmiera en demasía. Estela hizo todo sin siquiera despeinarse, es una mujer con mucho arrojo…es muy valiente.
La última semana no pude acompañarle, le iba a ver siempre que tenía tiempo o si no, lo sacaba de otras tareas.
Esos días tenía que cumplir con compromisos fuera de la ciudad y no pude estar allí para despedirme…Es triste recordar a un amigo como él postrado en esa silla y aún así no dar su brazo a torcer. La última vez que lo vi le expliqué de que me iba a ausentar por unos días…me dijo: - ¿Quieres que te acompañe?

2 comentarios: