miércoles, 7 de abril de 2021

Desperdicio

 

Es lo que siempre dicen…

De tanto escucharlo pensaba que así sería. Pero no, no pensé en mi mujer, no pensé en mis hijos, no pensé en mis padres. Ningún miembro de mi familia pasó por mi cabeza. Tampoco vi escenas de mi niñez.

Simplemente, cuando la camioneta se abalanzó sobre mi auto, supe que mi destino estaba sellado. No tenía sentido intentar salir de allí. Recuerdo que de mi boca salió un sonoro: “¡¡Uffffff!!” y que, inmediatamente, pensé en que había sido un desperdicio rechazar el plato de lentejas que me ofrecieron a la hora de almuerzo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario